Causas inmunológicas en abortos de repetición
Las causas inmunológicas implicadas en el reconocimiento entre el feto y la madre para permitir su implantación en la pared uterina son complejas, pero se van conociendo cada vez mejor gracias a la investigación.
La Dra. Silvia Sánchez nos los explica, así como otros trastornos implicados en los abortos de repetición que pueden tener causas inmunológicas.
Cuando nos referimos a las causas inmunológicas de los abortos de repetición, ¿a qué nos estamos refiriendo?
Normalmente lo que conocemos como sistema inmunitario es un sistema para la defensa del organismo frente a agentes infecciosos que pueden provocar enfermedades infecciosas o agentes tóxicos.
En este caso el embrión genera una respuesta extraña en el sistema inmunológico de la madre y una de las grandes preguntas que se han hecho los inmunólogos es cómo es posible que el sistema inmunológico de una madre no se defienda, no ataque un embrión “diferente”. Por “diferente” nos referimos a los antígenos paternos.
Se produce una respuesta inmunológica de la madre hacia el bebé que es contrarrestada por una serie de mecanismos que fundamentalmente de forma activa a través de la placenta y que se llama tolerancia materna.
Todas aquellas causas fundamentalmente inflamatorias que van en contra de esa tolerancia materna pueden interferir en un embarazo normal o causar la pérdida de un embrión.
¿Cuál es la frecuencia de estas alteraciones en la población de abortadoras de repetición, en qué consisten y cómo afectan al mantenimiento de la gestación?
Tenemos un documento consensuado y que se revisa periódicamente (cada 4 años), en el cual la mitad de los casos de abortos de repetición (dos o más abortos de causa desconocida) conocemos la causa.
De esa mitad de casos, la causa número 1 de los abortos de repetición es una causa inmunológica, que es el síndrome antifosfolipídico obstétrico. Viene a ser un 19-22% de los casos.
La segunda causa más frecuente, desde el punto de vista inmunológico, es todo lo que tiene que ver con problemas endocrinos, que en la mayor parte de los casos es de causa autoinmune, problemas del tiroides e hipo o hipertiroidismo, que la mayor parte de los casos son inmunológicas, y diabetes o problemas metabólicos que también lógicamente son o inflamatorios o autoinmunes.
De esa mitad que a día de hoy se consideran las causas desconocidas, se han ido describiendo en los últimos 15 años, una serie de causas que tienen que ver con esta alteración del equilibrio del sistema inmunológico, y que lo que favorece es un estado proinflamatorio en contra del estado anti inflamatorio de un embarazo normal.
Entre esas posibles causa como se han descrito problemas autoinmunes específicos, como es la enfermedad celiaca o inespecíficos como es tener auto anticuerpos positivos, que se traducen en un proceso inflamatorio.
En los recientes trabajos del grupo de Cambridge que se han validado sobre la incompatibilidad entre las células NK de la madre y el HLA-C del embrión que es lo que se llama Incompatibilidad HLA-C y que a día de hoy es una causa reconocida de abortos de repetición, de fallos de implantación y de problemas en el embarazo para la madre, como es la preeclampsia. Esta incompatibilidad la vemos en un 20% de los casos. Podemos ver distintos problemas en una misma paciente.
Después tenemos más causas donde nos falta más grado de evidencia que los valide, que van en función de marcadores biológicos inflamatorios. Es decir, valores que somos capaces de ver