Diagnóstico y tratamiento anatómico

El diagnóstico y tratamiento anatómico relacionado con abortos de repetición se puede realizar gracias a diferentes tipos de pruebas más o menos invasivas. En este video la Dra. Jacqueline Macedo describe cada uno de ellos, así como los tratamientos para solucionar estos defectos.

¿Qué pruebas permiten detectar estas alteraciones?

Muchas son las pruebas que podemos realizar en la consulta desde una ecografía básica ginecológica, dónde podemos ver el útero, el volumen intrauterino, si hay miomas, si hay pólipos, si hay adherencias o alguna malformación.

O cuando decimos a las pacientes, tienes el útero en forma de corazón, que es una variante anatómica normal que no produce ningún problema desde el punto de vista de fertilidad o de abortos pero que las pacientes sepan que es una variante morfológica que existe.

Y luego el gold standard, es la histeroscopia, es un estudio que consiste en entrar con una cámara muy pequeña, muy finita, dentro del útero y poder descartar si hay alguna patología intracavitaria para poder realizar una corrección quirúrgica adecuada según el caso.

Diagnóstico y tratamiento anatómico en abortos de repetición

¿Nos puede explicar qué técnicas permiten corregir estos defectos anatómicos?

A través de la histeroscopia, que es el gold standar, al entrar en la cavidad uterina si vemos un septo, que es un tabique que divide la cavidad uterina en dos, podemos realizar una histeroscopia quirúrgica y dejar el útero con un volumen suficiente para poder llevar a cabo el embarazo a término y que no termine la gestación en una pérdida.

Luego dependiendo de la patología uterina, si hay un mioma lo resecamos, si hay un pólipo también se reseca, si hay adherencias se liberan esas adherencia y fibrosis para dejar la cavidad con un volumen óptimo para poder llevar a cabo el embarazo a término y que no se produzcan pérdidas gestacionales en un momento determinado.

También existe lo que llamamos la metroplastias que es cuando el útero tiene un volumen muy pequeño, que es una malformación cada vez menos frecuente pero que existe, y que podemos ver en consulta, la metroplastia nos permite ampliar la cavidad uterina para poder llevar a cabo el embarazo.

Histeroscopia como tratamiento anatómico

¿Es bueno el pronóstico del siguiente embarazo, después de haber remediado el defecto anatómico?

Una vez que encontramos la causa del factor uterino el pronóstico es muy bueno. De pérdidas gestacionales del 55-60% en el caso de tabiques o de malformaciones uterinas o de un pólipo, podemos corregir con una cirugía adecuada el riesgo puede ser de un 10% de los casos.

Es decir, los casos de factor uterino hay que conocerlos y tratarlos con el tratamiento adecuado.